Hace tiempo que me dedico a la fotografía y gracias a esta labor he conocido a personas que me han sorprendido y me han dejado varias enseñanzas de vida.
Aparte de la fotografía publicitaria, busco proyectos personales donde aplico lo que sé y además brindo mi grano de arena a la sociedad. Las organizaciones sin ánimo de lucro son un tema que me ha llamado la atención desde niño y quise aprovechar esta ocasión para realizar una sesión de fotografía con una de ellas.
Mahavir K-mina es una organización que le brinda una oportunidad a las personas que han perdido un miembro inferior por diferentes circunstancias y que no cuentan con el recurso económico para adquirir una prótesis, logrando así recuperar su autoestima y su independencia.
Para estas fotografías me comuniqué vía mail con Julián, la persona encargada en el área de comunicaciones de la organización y acordamos una reunión en su oficina. Me presenté y le mostré mi portafolio con las fotografías que realizo, de inmediato se interesaron mucho en mi trabajo y después de pactar el día para la sesión, me invitaron a recorrer las instalaciones. Conocí también al equipo administrativo y al equipo que se encarga de fabricar las prótesis.
El tema principal que buscaba tratar en las fotografías era el de la hermandad por parte de las personas que trabajan allí, pues es algo que noté en un principio debido a que todos se comportaban como una familia.
No quería que las fotografías se limitaran a retratos de los que trabajan allí, sino que también buscaba personas a las cuales estaban en proceso de entrega de sus prótesis o de mejoramiento de la misma. En Mahavir K.mina dan todo el servicio; es decir: toman los datos de la persona, las medidas de sus piernas para que queden precisas al momento de ya acomodar la prótesis y luego la persona espera a que la llamen para que le entreguen su prótesis.
Conocí tres historias de vida que te tocan el alma con su humildad y coraje ante la pérdida de una de sus extremidades. Ellos me narraron sus historias durante la sesión de fotografía. En el lugar también contábamos con la compañía de sus seres queridos y amistades.
Lastimosamente, el sábado 15 de octubre de 2022 me enteré por mi madre mientras leía el periódico de una triste noticia. Ella me muestra en una de las páginas los avisos obituarios y allí me señala que la Corporación Mahavir Kmina lamenta la muerte de Juan Rodrigo Mejía. Quedé devastado.
A Juan Rodrigo lo recuerdo como un entregado hacia los demás, a su labor, con temple y una calidad de persona indescriptible. Compartimos un poco de nuestras vidas y de nuestras experiencias mientras le hacía las fotografías de retrato.
Como fotógrafo, busco dar mi aporte al mundo con mi labor trabajando al lado de fundaciones y con personas que desean que su historia sea contada, permitiendo ser una ventana y así llegar a muchas más personas.
Escribo esto con un dolor en el alma y más porque veo de nuevo las fotografías y no logro evitar las lágrimas.
Pueden escuchar en este podcast su voz y su labor dando clic en el siguiente link.
Gracias por leer.
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